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Dando forma a los sueños

Como hablamos ayer, daremos hoy formalmente el inicio a una nueva serie denominada "Moviliza tu mundo", así que bienvenidos a esta gran aventura.


Y empezaremos por preguntarnos, ¿Cómo se siente recordar y comprender que tengo habilidades, dones y talentos que aún no reconozco lo hábil que soy en ellos, y sin embargo me puedo abrir a reconocerlos?


Mucho se habla de los dones, habilidades y talentos que tenemos para realizar los diferentes trabajos y de alguna forma sale a colación las estrategias y metodologías adecuadas y altamente aceptadas por todos para establecer una acción, sin embargo, es de gran importancia que se tenga una conexión directa con el propósito para el cual se está estableciéndola, así como con el objetivo que se quiere alcanzar desde el aspecto emocional sostenible en el tiempo.


Y es aquí cuando se hace importante acotar a que hace referencia el propósito que no es otra cosa sino aquel que hace referencia al sentido que se le puede dar a un aspecto especifico de la vida o a la vida misma, pues responde a preguntas tales como "por qué" y "para qué“ se hace lo que se hace, es decir la motivación, la emoción que mueve a conseguir eso que deseamos.


Creando mi realidad

Y el objetivo, es aquel donde se encaran los grandes logros, que en algunos casos se plantean de manera global y específica para lograr al resultado o la meta anhelada, la cual está compuesta por un conjunto de acciones.

Así que todo objetivo que nos planteamos en un determinado momento de la vida está compuesto por una serie de acciones, que unidas y alcanzadas conforman el logro del objetivo que aúnan a un propósito deseado.


La gran mayoría de las veces cuando estamos planeando movilizar nuestro mundo se nos hablan que estas acciones deben ser especificas o simples. Tu cerebro debe entender, sin ningún tipo de ambigüedad, que es lo que quieres conseguir. Imagínate que te marcas como objetivo “vivir de tu proyecto de emprendimiento” qué bueno ¿verdad?


Este objetivo, tal y como está formulado, es poco específico. Estaría mejor que se detallen parámetros como: ¿Cuánto quieres de ganar?,¿Cuántas horas quieres trabajar?, ¿Desde qué emoción quieres entrar en acción?, etc...


Como sabemos hoy en día todo es medible, hay muy pocas cosas que aun no se pueden identificar con cifras, así que deberás marcar los parámetros necesarios para saber que están yendo por el buen camino y que definitivamente, cuando así sea, lo habrás conseguido, pero en caso de no tener valores de referencia, créate unos, que se conviertan en tu guía.


Recuerda, toma acciones que estén dentro de tu rango de acción, que sean totalmente alcanzables, si crees que no puedes conseguirlo es posible que no lo consigas, es lo que llamamos profecía auto cumplida y la cual condiciona completamente tu sistema emocional para llevarlo a cabo. En la medida que no creas en tus posibilidades, generarás un estado emocional poco favorable para alcanzarlas.


Además, tus acciones a nivel inconsciente te boicotearán para no conseguirlo. Imagínate que tienes como objetivo vender a un cliente difícil y piensas que es imposible que te compre. ¿Cuál es tu estado emocional con ese pensamiento? Con ese estado emocional. ¿Cómo crees que será tu proceso de venta?,¿Crees que hablarás con fluidez?,¿Crees que negociarás con normalidad?¿Crees que estarás abierto a descubrir sus necesidades?


Tu estado emocional mermará sustancialmente tus capacidades como gestor de ventas y como consecuencia de ello, reducirá drásticamente tus probabilidades de venta, cualquiera que sea tu producto o servicio. Y recuerda, constantemente estamos en estado de venta. Y ahora la pregunta del millón… ¿quién ha provocado ese estado emocional? Efectivamente, tú mismo al pensar que no te comprará. Ahora comprendes ¿Verdad? Profecía auto cumplida.


Preguntas como estas te pueden ayudar a clarificar si un objetivo es alcanzable o no: ¿qué me hace pensar que es imposible? ¿Alguien más lo ha conseguido? Si es así ¿Qué me impide no conseguirlo yo?


“Tanto si piensas que puedes, como si piensas que no puedes, estás en lo cierto”. Henry Ford


Por otra parte, es importante que midas tus fuerzas, que seas consciente de los recursos de los que dispones y los recursos que necesitarás para la consecución de esa acción u objetivo. Es importante que tomes consciencia real si esos recursos que necesitas están en tu mano.


Hacerlo te ayudará, no solo a formularlo sino a establecer las acciones concretas. “La mejor forma de predecir el futuro es creándolo”. Peter Drucker


Te invito para que definas tres objetivos a alcanzar en esta movilización de tu mundo, puedes tener un objetivo relacionado con la parte física o material, un segundo objetivo intelectual o emocional y un último objetivo de tipo espiritual.


Grandes sorpresas podremos descubrir en este camino de movilizarnos a lo que realmente deseamos obtener limpiando y liberando las emociones.

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